Nelson Bonilla tuvo una breve participación de menos de 10 minutos en el partido contra Montserrat, pero los abucheos de la afición no se hicieron esperar, al igual que con Darwin Cerén.
Nelson Bonilla enfrentó abucheos y silbidos por parte de la afición durante los pocos minutos que jugó ante Montserrat, evidenciando una relación cada vez más tensa.
El delantero, quien ya se había disculpado públicamente por un gesto hacia los hinchas en el juego contra Bonaire, expresó su frustración por el trato recibido.
“Me disculpé, pero no entiendo por qué las críticas se han vuelto tan personales. Es doloroso que te ultrajen en tu propia casa”, comentó Bonilla.
El jugador reveló que su familia evitó asistir al estadio tras la mala experiencia del primer partido, destacando el impacto emocional que esto le ha generado.
“Soy el cuarto goleador histórico de la Selección, les guste o no. Los números están ahí. Aun así, me duele que mi gente me trate así”, afirmó.
A pesar del ambiente adverso, Bonilla aseguró que seguirá comprometido con la Selección, aunque admitió irse con un sabor amargo tras su participación en la Liga B.
“Desde septiembre he tenido momentos difíciles con la Selección por lesiones. Hoy me voy triste porque me duele que mi propia gente me ultraje”, agregó.
Por su parte, Darwin Cerén, quien también fue blanco de silbidos, criticó la falta de respeto hacia los jugadores, aunque reconoció que las críticas forman parte del fútbol.
“Entendemos las críticas, pero humillar a alguien es diferente. Yo acepto los comentarios, pero creo que el respeto debe prevalecer”, afirmó el capitán.
Ambos jugadores señalaron que, pese a cumplir los objetivos deportivos, el rechazo de la afición deja un reto emocional que deberán superar en futuros compromisos.